Él es un hombre que ama mostrarse,
Tiene tatuado un sol en el hombro.
Un sol aborigen un tanto remixado.
Un sol con rostro fiero.
Un sol incandescente,
Un sol que tiene a flor de piel sus emociones.
El hombre no se muestra para vanagloriarse,
Muy lejos de eso esta.
Mostrarse es mas bien una obligación,
Para dejar ver sus pasiones,
Aquellas que le hacen daño,
Sus propias debilidades,
Y aquellas otras que lo llenan por completo,
Todo de lo que esta enamorado.
Su Misión es prestar Testimonio,
Por eso es que habla de su vida.
Como para hacer ver a todos,
Que ante aquellas debilidades,
Sin Lucha y sin Dios no somos nada.
Ella en cambio es como la luna.
Inspira a la conciencia.
Es discreta y nunca pica fuerte.
En algunas ocasiones se muestra,
Se muestra un poquito, se muestra completa.
En otras no se la ve, aunque ahí está siempre.
Cobra fuerzas a partir del anochecer,
Y suele ocultarse en las sombras.
Le gusta pasar inadvertida.
Esta dotada de una gran sabiduría,
Pero es tímida para expresarla.
Cuando esta verdaderamente llena,
Ilumina entre las tinieblas,
Facilitándonos marchar en medio de la noche.
A esta extraña y original pareja,
Los unió su amor por estos astros.
Estaban unidos, aún antes de conocerse.
Entre el atardecer y el amanecer,
Se fueron encontrando.
Y por fin se descubrieron.
Compartieron sus creencias,
Y llegaron a entender…,
Que los astros no son fin,
Sino medio, para llegar al Creador.
Ese Creador que los pensó juntos,
Mucho antes de nacer los dos.
Reconocieron esta Voluntad,
Y haciendo honor a ella.
Decidieron estar juntos siempre,
Acrecentando la Fe en su Religión,
La del Unigénito.
A quien hicieron ...,
Su Señor, Su Maestro y Su Rey.
10 comentarios:
Hay pero que hermoso el amor de la luna y el sol.
Había leído yo que cuando fueron creados El Sol para iluminar el día y La Luna la noche eso sería su destino el vivir separados, entonces Dios creo el Eclipse para que se amaran por eso en ese momento no se puede mirar el cielo, pues puedes cegarte al ver tanto amor y es que solo tiene ese instante para amarse, el resto del tiempo El Sol arde de pasión por la Luna y ella vive en las tinieblas de su añoranza.
Muy bonito lo que escribiste me encanto!
Por cierto el blog te quedo mucho mejor te felicito ;)
Un abrazo desde mis rincones...
muy bueno leandro un muy linda historia de amor te felicito
Victor
Un hermoso amor del sol y la luna. Me has iluminado la caminata por internet. Me alegro haber entrado aprovechando que la puerta estaba sin cerrojo. Escribes genial!
Una original y hermosa forma de obligarnos a mirar,aunque sea de vez en cuando, hacia el cielo...
abrazos
Maravilloso este relato. Saludos
Él es un hombre que ama mostrarse,
El hombre no se muestra para vanagloriarse,
Existe de algún modo contradicción para lo cual no estoy aquí.
Solo parece curioso el desarrollo del escrito.
De todos modos estoy para leerte.
Un saludo Leandro.
Estimado José Joel:
Lo que se ha querido poner de manifiesto no es una simple contradicción, sino una verdadera paradoja.
Lo paradójico es muy característico de la Bipolaridad.
Saludos afectuosos.
Wowww "el amor del sol y la luna" es fantástico al igual que tus palabras, me fascina como juegas con ellas.
Mis más gratos saludos.
Déjame decirte que eres todo un artista de la poesia.
Éxitos!!!!
Gracias a todos por tan alentadores comentarios. Así da mucho gusto seguir escribiendo y armando este blog.
Saludos afectuosos.
lo paradojico de la contradicción que se ha puesto de manifiesto entre el amor por mostrarse y por otro lado el no deseo de mostrarse para vanagloriarse sino por la obligación en mostrarse, está relacionado con un cierto aspecto masoquista y que en su aspecto mas sublime está vinculado con la necesidad de dar un testimonio alentador de vida
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